Los pueblos sostienen que parte de las aguas residuales de vecinos y ganaderías siguen sin ser tratadas

La Comisión Europea ha decidido cerrar la queja tramitada por un colectivo vecinal de Picos de Europa que denunciaba que la red de depuración del parque regional y su área de influencia, en donde residen 7.337 habitantes en 58 núcleos de población -”24 más en la zona de influencia socioeconómica-”, se encontraba inutilizada después de haberse ejecutado una inversión de casi seis millones de euros, de los que el 80% fueron aportados por la UE. La Dirección General de Política Regional de la Comisión Europea notificó su decisión hace escasos días a los responsables de la queja, argumentando que la información facilitada por la Junta de Castilla y León sostiene que «las depuradoras se encuentran, a día de hoy, plenamente operativas». «Las instalaciones -”añade la carta-” han sido efectivamente puestas en marcha tras la reparación y reposición de los equipos e instalaciones».

La respuesta de Europa, más que decepción, ha provocado indignación entre representantes políticos y vecinos, puesto que no tienen constancia oficial de la operatividad de esta red de depuración, integrada por 60 instalaciones. La Junta no ha entregado la obra a los ayuntameintos, que sostienen que no todas las depuradoras funcionan correctamente.

Un mes para responder

Europa da un plazo de cuatro semanas a los vecinos de Picos de Europa para que aporten informaciones «nuevas o desconocidas» que puedan modificar el juicio de Charlie Grant, jefe la Unidad Jurídica y de Procedimientos del ente europeo y, en consencuencia, de quien depende que la queja continúe investigándose o se archive definitivamente.

Los abogados de Gedemol ya han preparado la réplica. Admiten que durante todo el año se han realizado diversas labores de mantenimiento y mejora, pero es muy dudoso que estén funcionando siquiera la mayor parte de ellas y más que lo estén realizando correctamente», dado el precario estado de conservación de la red de saneamiento, abandonada desde hace años.

El texto subraya que políticos locales y personal de la Adminsitración aseguran que «unas funcionan sólo parcialmente, que en otras simplemente se han realizado limpiezas externas y que algunas más están realizando un correcto funcionamiento».

Asimismo, en un llamamiento desesperado a las autoridades europeas, solicitan que tutelen, al menos durante el primer año, la puesta en marcha de la red y que exijan a la Junta que acredite las obras y mejoras realizadas, además de obligar a la Administración de Castilla y León a aportar informes sobre analíticas en los puntos de vertido que demuestren el cumplimiento del derecho europeo y que avalen el correcto funcionamiento de las instalaciones. «Nos da miedo que este asunto se cierre en falso», advierten desde Gedemol.

Sin embargo, la versión de la Junta es totalmente opuesta. La Dirección General de Infraestructuras Ambientales de la Consejería de Medio Ambiente «mantiene», según fuentes del departamento, que las depuradoras ya están funcionando debidamente, si bien no detallaron el estado de cada una de ellas, como había sido solicitado por este periódico. La información enviada a Europa para desalentar su actuación por el evidente retraso en la operatividad de estas instalaciones tampoco está disponible, según la misma fuente.

Vecinos y alcaldes consultados coinciden en exigir a la Junta que aclare si se han gastado los 400.000 euros en los que se tasó hace unos dos años la puesta a punto de la deteriorada red y en qué instalaciones, porque las cuentas no salen: en los presupuestos del 2009 tan sólo se consignaron 150.000 euros para estos trabajos

La red se hizo hace doce años y después se abandonó

El vertido de las aguas residuales a los ríos y arroyos del espacio protegido, uno de los más emblemáticos del continente europeo, intenta ser controlado desde hace doce años, cuando la Junta puso en marcha una imponente red de depuración que ha quedado en el abandono porque tuvieron que ser ayuntamientos y juntas vecinales quienes se hicieron cargo del mantenimiento de estas costosas instalaciones y de los gastos generados por el consumo de electricidad.

Los pueblos de Picos piden a Europa que, antes de cerrar la queja definitivamente, constate el correcto funcionamiento de las depuradoras. «De no ser así es posible que en unos meses nos encontremos en la misma situación que hace unos años». La exigencia no es baladí, puesto que el tutelaje de Europa permitiría saber si el sistema de gestión propuesto es útil para garantizar el saneamiento de Picos de Europa.

Europa se enteró del abandono por los vecinos

Los vecinos de Picos denunciaron el abandono de las depuradoras ante Europa hace casi tantos años como llevan construidas. Nunca estuvieron de acuerdo con esta red, enormemente cara de mantener. En las imágenes que aparecen sobre estas líneas se reproducen algunas de las cartas respuesta enviadas por la Comisión Europea a los miembros de Gedemol, informando de la evolución de sus quejas. La última misiva, notificada hace unas dos semanas, parece ser la definitiva: las autoridades europeas dan por archivada la queja, argumentando que se dan por satisfechas con la documentación remitida por la Junta.